Llega una nueva edifición de Gastrofestival Madrid, del 23 de enero al 7 de febrero, en el que este año destacan las actividades que tendrán lugar en la calle, en forma de 300 actividades y 300 restaurantes que van a participar en este gran evento que mueve toda la ciudad.
En total, más de 400 empresas e instituciones públicas y privadas forman parte de esta
fiesta gastronómica. El patrocinio de Mahou, Zumosol y Tapas, la colaboración de
Mastercard y Mercados de Madrid, la participación de JCDecaux y Deliveroo, y de ELLE como medio asociado han permitido desarrollar una de las programaciones más ambiciosas hasta el momento. Pues habrá talleres, gastrofashion, actividades en la calle, en los museos, en tiendas… en un evento que busca la divesificación de la gastronomía en todos los sentidos.
Un ejemplo son los más de 300 bares y restaurantes repartidos por toda la ciudad participan en Gastrofestival Madrid con sus Degustatapas: tapa más botellín de Mahou por 3 euros; también las Barras Favoritas, con un Rioja, tapa más vino de Rioja por 6 euros; y Cena con las Estrellas, una propuesta que trae a Madrid a grandes chefs internacionales para ejercer de maestros invitados en algunas de las cocinas con más renombre del momento.
Como novedad en esta séptima edición, todos los menús, especialmente diseñados para
la ocasión, se clasificarán en Cocinas españolas, Cocinas del mundo y Cocina fusión, con precios máximos de 40 euros.
Y otras iniciativas son la Ruta Golosa o la Ruta del Café de Colombia, además de coctelerías, escuelas de cocina, tiendas de menaje o tiendas gourmet se suman también a Gastrofestival Madrid con descuentos, precios especiales, degustaciones y otras propuestas.
Los mercados de Madrid también están presentes en este festival de la gastronomía a través de exposiciones, talleres, demostraciones y catas. Los visitantes del mercado de San Antón podrán ver una exposición con una selección de diseños de la colección otoño/invierno de Agatha Ruiz de la Prada, realizar una cata a ciegas o hacer la compra con un foodcoach.
Mientras que en el centro cultural Conde Duque, habrá salas y espacios que se abrirán para que niños y mayores disfruten de la gastronomía de una forma diferente. Por un lado, ofrecerá experiencias sensoriales, actividades que permitirán a los más inquietos descubrir nuevas aficiones gastronómicas. Los visitantes que pasen por el vestíbulo de Conde Duque se encontrarán una instalación comestible diseñada por la arquitecta María Navascués e inspirada en El jardín de las Delicias del Bosco.